Jueves Santo: “Jesús nos ilumina en el presente”
Ante la asamblea que concurrió a la Catedral de Puerto Montt monseñor Fernando lavó los pies de niños y jóvenes recordando la acción de Jesús con sus discípulos en la última cena y la vocación de servicio de unos con otros.
El arzobispo de Puerto Montt, monseñor Fernando en su homilía explicó que “esta última cena tiene muchos elementos simbólicos que van explicando lo que después Jesús va a vivir. En primer lugar y lo que nos interesa el día de hoy es que esta última cena con sus discípulos es la celebración de la Pascua que Jesús hace con ellos como lo hacía el Pueblo de Israel. La Pascua era la celebración más importante que tenía el pueblo de Israel porque significaba el momento fundante del pueblo, cuando el pueblo salió de Egipto y camino 40 años por el desierto hasta que llegó a la tierra prometida”.
“Jesús celebra la Pascua y sella una nueva realidad y utiliza los elementos del Pan y el Vino y dice: este es mi cuerpo, esta es mi sangre con la cual se sella la nueva alianza. Este jueves Santo hacemos memoria porque sabemos que nos Jesús nos ilumina en el presente. El don de la Santa Misa, de la eucaristía que reproduce el momento de la última cena es un don maravilloso para que podamos alimentarnos del cuerpo y la sangre del Señor. Para que podamos revivir y replantear esa alianza con Dios, porque lo que da sustento a nuestra vida es cuando nos encontramos con nuestra verdad más profunda, que es que somos hijos e hijas de Dios y si somos capaces de vivir esta verdad nuestra vida adquiere un sentido especial”.
Jesús hizo un gesto sorprendente, él juntó a sus doce apóstoles y les lavó los pies para expresar de lo que debe permitir la relación entre nosotros no es ni el poder, ni el dinero, sino justamente el servicio entre nosotros. Es así como monseñor Ramos recordó el gesto de Jesús lavando los pies de niños y jóvenes en la Catedral de Puerto Montt.
“El servicio nos edifica, nos construye, nos hace mucho más humano, porque nos permite tener nuestra vista en los demás. Por eso esta enseñanza de Jesús es muy importante”, dijo el Monseñor Ramos.